Madrid Río es el resultado de una transformación radical que ha convertido los márgenes del Manzanares en un oasis verde en pleno corazón de la ciudad
Madrid Río es mucho más que un parque urbano: es el reflejo de una profunda transformación que ha revitalizado los márgenes del río Manzanares, convirtiéndolos en un espacio verde y lleno de vida en medio de la bulliciosa ciudad de Madrid. Lo que antes era un lugar inaccesible y fragmentado por la autopista M-30, ahora es un oasis de calma y naturaleza que invita a pasear, descansar y disfrutar de la belleza del entorno.
El proyecto de Madrid Río comenzó con el soterramiento de la M-30, una autopista que durante décadas había separado a los madrileños del río y que impedía el acceso a sus márgenes. Gracias a la visión y el esfuerzo del Ayuntamiento de Madrid, se llevó a cabo la ambiciosa tarea de enterrar la autopista y liberar así un extenso espacio que se convertiría en el nuevo pulmón verde de la ciudad.
Con la M-30 fuera de la vista, se abrió paso a la reurbanización de la zona, dando lugar al proyecto Madrid Río, que transformó por completo la ribera del Manzanares. El parque resultante cuenta con más de 120 hectáreas de zonas verdes, 10 kilómetros de senderos peatonales y ciclistas, áreas de juego infantiles, pistas deportivas y espacios de descanso. Un lugar donde la naturaleza y la ciudad se funden en armonía, brindando a los madrileños un espacio único para disfrutar en familia o en solitario.
Pero la transformación de Madrid Río no se detuvo ahí. En los últimos años, se han llevado a cabo diversas intervenciones para ampliar y mejorar el parque, como la creación de una senda peatonal y ciclable que conecta Madrid Río con el Parque Lineal del Manzanares, permitiendo a los visitantes recorrer hasta diez distritos de la ciudad a pie o en bicicleta. Estas mejoras han contribuido a consolidar Madrid Río como uno de los grandes pulmones verdes de la capital española, un lugar de encuentro y disfrute para vecinos y turistas por igual.
La culminación del proyecto Madrid Río llegó con las obras en el ámbito Mahou-Calderón, que cubrieron el tramo restante de la M-30 y crearon un nuevo espacio de 67.000 metros cuadrados que conecta de forma continua las áreas norte y sur del parque. Con la inauguración del Parque del Atlético de Madrid en el antiguo estadio Vicente Calderón, se ha preservado la memoria de un lugar emblemático de la ciudad, integrándolo en el nuevo paisaje urbano de Madrid Río.
En definitiva, Madrid Río es un ejemplo de cómo la visión y el trabajo en equipo pueden transformar un espacio urbano en un oasis verde y lleno de vida. Un lugar donde la naturaleza y la ciudad se encuentran, creando un entorno único y acogedor para todos aquellos que deseen disfrutar de la belleza y la tranquilidad en pleno corazón de la capital española.