La llegada de la primavera trae consigo un despertar de la naturaleza, y en Madrid, la ciudad comienza a florecer con todo su esplendor. Uno de los lugares más emblemáticos para disfrutar de esta explosión de colores es la Quinta de los Molinos, un oasis de biodiversidad en medio de la urbe.
El diseño de la Quinta de los Molinos, a cargo del arquitecto César Cort Botí en los años treinta, cuenta con 1.895 almendros de las variedades marcona y desmayo largueta. Además, el parque alberga un bosque mediterráneo con pinos, encinas y arbustos autóctonos, creando un ambiente fresco y sombreado. Otros árboles como olivos, viñas, higueras, avellanos, lilos, mimosas, hibiscos, adelfas, bojes y romeros se suman a la diversidad de especies que hacen de este lugar un tesoro natural en el distrito de San Blas-Canillejas.
La floración de los almendros en la Quinta de los Molinos es un espectáculo que se puede disfrutar desde mediados de febrero hasta finales de marzo, siempre que las condiciones meteorológicas lo permitan. Esta renovación progresiva de los almendros garantiza la integridad del espacio y asegura que todos los árboles se encuentren en perfectas condiciones para que los visitantes puedan disfrutar de su belleza.
Pero en la Quinta de los Molinos no solo se encuentran especies arbóreas, también es un lugar perfecto para los amantes de las aves. Petirrojos, mirlos, verdecillos, verderones, gorriones, jilgueros, palomas torcaces y urracas son solo algunas de las aves que pueblan este oasis urbano. Además, la presencia de anfibios, insectos y mariposas añade un toque de magia a este rincón de Madrid.
Para disfrutar en familia, el Espacio Abierto Quinta de los Molinos ofrece actividades para niños, jóvenes y familias. Este centro de juego, creación y aprendizaje en constante evolución brinda experiencias abiertas para que los visitantes se relacionen con el entorno y entre ellos.
Las actividades programadas en el Espacio Abierto van desde representaciones teatrales como «El mago de Oz» de La Canica Teatro, hasta proyectos colaborativos como «La cittá infinita» para construir una ciudad imaginaria. Además, los jóvenes pueden participar en la 7ª edición de Mundo Quinta, donde tienen la oportunidad de crear su propia obra de teatro.
En resumen, la Quinta de los Molinos es un lugar único en Madrid donde la naturaleza y la cultura se fusionan para ofrecer a sus visitantes una experiencia inolvidable. Con su diversidad de especies arbóreas, aves, insectos y actividades para toda la familia, este oasis urbano es un tesoro que merece ser descubierto y disfrutado en cualquier época del año. ¡Ven y déjate sorprender por la belleza de la Quinta de los Molinos en plena primavera!