El Oratorio de la Casa de la Villa: Un Retorno a su Esencia Histórica – Diario del Ayuntamiento de Madrid

La restauración de los frescos de Antonio Palomino en el Oratorio de la Casa de la Villa terminará en la primavera de 2025

Los frescos del Oratorio de la Casa de la Villa, obra de Antonio Palomino, son una excelente muestra del estilo Barroco cortesano o escuela madrileña de pintura. Estas pinturas, que decoran los muros de uno de los espacios de mayor interés histórico-artístico en Madrid, han sufrido deterioro debido a cambios de uso y la filtración de humedad, lo que ha motivado su actual intervención.

El proyecto de restauración, emprendido recientemente por el Ayuntamiento de Madrid, incluye diversas tareas de conservación. Entre ellas se encuentran el análisis histórico, fotográfico y medioambiental de la capilla, la caracterización de materiales, y la limpieza de la superficie pictórica, entre otras labores. Estos trabajos técnicos se realizan con el objetivo de preservar y devolver el esplendor original a estas obras de arte.

El Oratorio de la Casa de la Villa, parte de la sede histórica del Ayuntamiento de Madrid, fue construido en el siglo XVII por encargo del rey Felipe IV. En su interior, destacan el Patio de Cristales, el Salón de Sesiones y el pequeño Oratorio, que alberga las pinturas de Palomino. Estas representan el misterio de la Inmaculada Concepción de la Virgen María, combinado con el elogio a la realeza y a la Villa de Madrid.

La restauración de los frescos del Oratorio de la Casa de la Villa está a cargo de expertos en conservación del Instituto del Patrimonio Cultural de España y la empresa Talleres de Arte Granda, S.A. Los trabajos incluyen la aplicación de tratamientos específicos para la limpieza y consolidación de las pinturas murales, así como la reintegración cromática de las mismas.

Antonio Palomino, pintor, restaurador, tratadista y presbítero, es el autor de estas obras maestras del Barroco español. Nacido en Bujalance en 1655, Palomino se estableció en Madrid en 1678 y realizó numerosas obras para la Casa Real y el Concejo de la Villa. Su legado artístico abarca no solo los frescos del Oratorio de la Casa de la Villa, sino también otras obras en Valencia, Salamanca y Granada, entre otras ciudades.

La restauración de los frescos de Antonio Palomino en el Oratorio de la Casa de la Villa es un proyecto de gran envergadura que busca preservar y poner en valor una parte importante del patrimonio artístico de Madrid. La primavera de 2025 marcará la finalización de estos trabajos, permitiendo a los madrileños y visitantes disfrutar de estas magníficas obras de arte en todo su esplendor.

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