El turismo en la Comunidad de Madrid: un sector en crecimiento
El consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Mariano de Paco Serrano, ha destacado recientemente el notable crecimiento del turismo en la Comunidad de Madrid. Según sus declaraciones, este aumento no solo beneficia a la economía local, sino que también refleja la apuesta del gobierno autonómico por una oferta turística de calidad, centrada en la cultura, el ocio y el estilo de vida madrileño.
Durante su visita al Hotel Palacio de los Duques Gran Meliá en la capital, De Paco Serrano resaltó que un 22% de los visitantes optaron por alojarse fuera de la ciudad, un 4% más que en años anteriores. Además, el 24,6% de estos visitantes fueron turistas internacionales, siendo el mercado estadounidense el principal, seguido de Italia, Francia y México.
En cuanto a la duración de las estancias, el segmento de 4 a 7 noches lidera las preferencias, pero la mayor subida se ha registrado en la franja de 8 a 15 noches, con un incremento del 34,4%. Asimismo, las cifras de empleo y ocupación en el sector turístico también son alentadoras, con la Comunidad de Madrid posicionándose como la segunda región con mayor crecimiento, contando con 461.196 empleados y un aumento del 4,8%.
Además, la región se consolida como un centro de inversiones hoteleras, siendo la segunda ciudad más atractiva para la apertura de nuevos establecimientos, solo por detrás de Londres. Se ha observado un significativo interés por parte de operadores latinoamericanos en invertir en el sector hotelero de la capital.
En resumen, el turismo en la Comunidad de Madrid está experimentando un auge sin precedentes, con cifras récord en visitantes, ocupación hotelera y empleo. Este crecimiento refleja el compromiso del gobierno regional con la promoción de una oferta turística de calidad, que atrae a viajeros nacionales e internacionales ávidos de experimentar la riqueza cultural y el estilo de vida madrileño. Sin duda, la Comunidad de Madrid se consolida como un destino turístico de referencia, capaz de satisfacer las demandas de los viajeros más exigentes.